Triple Corona

Tradicionalmente se considera que un bateador logra la triple corona cuando encabeza en una temporada los departamentos de promedio de bateo, jonrones y carreras empujadas. No obstante las estadísticas de última generación hacen emerger renglones que superan estos en autenticidad. Las hazañas individuales se están midiendo con más frecuencia porcentualmente que en volumen para conocer el valor real de los resultados de un jugador a favor del equipo.

Acumular una determinada cantidad de carreras empujadas para un hombre que batea en el núcleo de la alineación depende de la capacidad que tengan de embasarse los que le preceden, por eso es tiene más importancia el porcentaje de corredores que un bateador remolca en relación a los que encuentra en base que el total.

Existe una distorsión ancestral en relación al jonrón y las carreras empujadas. Cuando un bateador dispara un jonrón con las bases llenas remolca a tres corredores, pero se le anotan cuatro carreras empujadas.

Realmente el batazo produjo cuatro anotaciones, pero solo se remolcaron tres pues una fue el mismo bateador. En el caso que el cuadrangular sea con las bases limpias se produce una anotación, pero al bateador le anotan una carrera empujada y una carrera anotada.

El principio fundamental del juego es anotar carreras y estas se logran avanzando en las bases. Siempre se le ha dado una gran importancia al ganador al promedio de bateo, por encima del que consigue un mejor slugging a pesar que este tiene mucho más valor. Al momento de escribir esto José Bautista tiene un promedio de bateo de .232 con un slugging de .528 y un Porcentaje de Embasarse de .353, números que se pueden comparar, como muestra de lo que digo, con los de Starlin Castro que son .302/.449/.315. Obviamente Bautista ha sido más productivo para los Azulejos que Castro para los Cachorros.

De la suma del Porcentaje de Embasarse y el Slugging surge el OPS con una lógica aplastante para medir la calidad de un bateador. Si se tiene dominio del plato y se es selectivo para hacer los swings incitando que el lanzador haga sus envíos en la zona de strike y además se genera poder se está ante un excelente bateador. Agregarle a esas cualidades que pueda generar un buen promedio de bateo entonces se eleva la calidad a la máxima potencia.

Lo planteado conduce a entender que la verdadera triple corona ofensiva radica en el bateador que consigue encabezar en los departamentos de promedio de bateo, porcentaje de embasarse y slugging. El año pasado Miguel Cabrera estuvo a punto de lograrlo, perdió de José Bautista la corona de slugging.

En el 2010 el venezolano impidió que la obtuviera John Hamilton cuando lo superó en OBP. El último en alcanzarla fue Joe Mauer en 2009 con .364/.442/.586.